jueves, 27 de octubre de 2016

Capítulo III.- Doe

Es un John Doe cualquiera. Cree que podrá acercarse sin que te percates. Te subestima; detectas el sonido del motor y de las 4 puertas de una Mitsu double cab cerrándose casi al unison, y que se convierte en un réquiem que augura un final espeluznante. 
Se trata de tener claro que para los hombres del viejo Prawn sólo eres una mercancía a desmenuzar, y que si no actúas rápido y contundente vas a terminar hecho añicos, seguramente bajando rápido hacia el fondo del mar dentro de un barril de chapa de acero.

Después de diez años de planear y ejecutar esa mierda se han enterado que fuisteis vosotros. Los muy desgraciados no saben que hoy en día tenéis otros clientes, y que principalmente os dedicáis a proveer de artefactos y municiones a los distintos Gang-lords que operan en antigua Barcelona.

Le pides a S0da que deje el arma, que tome otro valium, y que se focalize en quedar-se quieto y omitir sus impulsos esquizo-paranoides, pero él te responde con una carcajada, levantando el dedo medio de su mano izquierda mientras empuña con la derecha la Five-Seven que lleva escondida en la espalda, a la vez que sube el volumen del stereo a todo trapo.

Un brazo aporrea la puerta de entrada, mientras la voz de un hombre rudo en el exterior grita -Hendrike!!! Estás muerto!!-.

Enric

2 comentarios:

s0da dijo...

Para mí que Hendrike sale vivo por los pelos pero que a S0da le dan lo suyo...

Anónimo dijo...

Ya se verá, S0dapio. Voy a un capitulo cada 8 años :P