domingo, 8 de septiembre de 2024

Call me a dog

Desciendo despacio controlando la fuerza. Mis labios quedan a un dedo del suelo, y me elevo con explosividad. Mientras el reloj en mi muñeca cuenta las series y repeticiones, busco en el ejercicio esas endorfinas que me permitirán descansar luego, así que con cada empuje en estas 150 push ups consigo apartarla de mi mente.

Ella lo vive distinto. Sin poder escapar de la pesadilla de sus propias decisiones no duerme, y la falta de sueño le hace perder la poca racionalidad que le queda. El miedo y el dolor la retuercen: la diferencia entre la expectativa de una huida idealizada y la realidad lapidaria es por fuerza convulsa.
Ayer, entre gestos de odio y dolor, poseída y con la mueca de Regan, me escupió un "ets un puto gos tinyós de merda", que le dolió más a ella que a mí, porque ve que en su sordera emocional jamás fue capaz de entender nada.

Escucho a Chris Cornell, y me doy cuenta de que tendremos que buscar otro camino, porque este ha terminado de manera abrupta, y es que cada día cuenta, y ahora es el momento de entender que quizá sin saberlo vivíamos en el cielo, y que lo que nos queda desde ahora es solo decadencia, y el resto es historia.


Enric

PD: Temple of the dog fué publicado el 16 de abril de 1991.