Es inapreciable, pero lo vi en la foto. Era todo inminente. Quería ser ingeniero, hackearlo todo para hacer un mundo nuevo. Iba todo tan rápido que las asignaturas trascendían al subconsciente para ser olvidadas en un tiempo récord.
Ahora no puedo. Los niños gritan todo el rato y yo me distraigo y jugueteo perdiendo el tiempo. Escribo en silencio, porque no publico nada y si lo hago nadie me lee... A todo esto, ayer y por carambola, encontré la firma de Kay en el artículo de un periódico. Le pregunté, y me dijo que sí, que está viva y que sus textos todavía siguen allí, colgados. Sus blogs nunca han sido borrados. Quedarán (espero) para siempre, en esa especie de consciencia colectiva intangible que es Internet. La nube donde todo parece importante, que es un reflejo de nuestra sociedad moderna, y donde 50% de su contenido es pornografía que cosifica a la mujer como si fuese un bicho.
La foto donde aparezco es en la biblioteca, con Tedi. La hizo Iván. Visto en perspectiva creo que la verdad es que no cambiamos nada, el mundo no es mejor; va todo hacia abajo. Recuerdo que escuchaba el Audioslave, que ahora cumple 18 años, y que suena mientras pienso en todo esto, y tú me lees.
Enric
2 comentarios:
Ya ves como pasa el tiempo viejo amigo ;)
Saludos amigo!
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